Desayunar en el Centro debería ser un hábito de todos los que vivimos en Puebla. Más que en cualquier otra parte de la ciudad, hay algo en esta zona que convierte al hecho de iniciar el día aquí en toda una experiencia en sí misma. Y más aún si esto se vive en fin de semana.

Desde mediados de agosto, lo anterior no sólo es posible, sino mejor gracias a algo que veníamos esperando desde hace tiempo: desayunos en Restauro. Lo único que le hacía falta a este espacio gastronómico y de descanso (en caso de que no lo supieras, la parte superior de esta casona del siglo XVI son 4 lofts para realmente vivir el Centro) era poder empezar el día aquí.

#hazbarrio

“Sabíamos que queríamos algo sencillo pero muy rico. Así que elegimos una serie de platillos básicos, tradicionales, que sabemos le gustan a la gente y nos dedicamos durante más de un mes a perfeccionarlos hasta que fueran deliciosos”, nos contó Carlos Allende, el chef a cargo de Restauro. Algo esencial para este espacio era hacer que la gente viva el Centro a través del desayuno, a través de los platillos que presentan.

El menú es sencillo, y por lo mismo, muy claro. Se divide en Antojos, Huevos, Chilaquiles, Tradicionales, Para los niños y se complementa con una sección de bebidas calientes, otra de jugos y una de pan.

Además, Restauro busca mantenerse fiel a la premisa que guía su proyecto: hacer barrio. Por lo mismo, muchos de los platillos que encuentras aquí son comprados a productores del Centro y sus alrededores. Desde los churros de Catedral, hasta el pan que se hornea en The Bakery Café (ubicado a tan sólo unos pasos de este espacio) o los tamales que adquieren en la mítica Tamalería San José.

Pudimos probar un poco de todo, y éstos fueron nuestros favoritos.

Lo vemos de dos formas: éste puede ser para los que quieren algo ligero o –la que más nos gusta– el aperitivo perfecto (como si en las mañanas hiciera falta algo más para abrir el apetito). Esta selección de frutas de la estación se acompaña de frutos rojos, almendras y se espolvorea con azúcar glass.

Una forma fresca y sencilla de empezar el día.

Ya que pasó el aperitivo, qué mejor que algo para compartir. En este caso la orden de tlayoyos es perfecta. Vienen tres: chicharrón, requesón y frijol. Cada uno de estos sabores es elevado por las fajitas  de cecina que los acompañan (la cecina de Restauro es un verdadero placer) ¿Y qué termina por redondear a esta trilogía? El perfecto toque de crema y queso que los corona.

Un desayuno típicamente jarocho en la capital poblana. La mezcla del huevo con la salsa de chile serrano es perfecta para quien quiere comenzar el día con una buena dosis de sabor, y en el caso de este plato, hay hasta para llevar. Como buen desayuno jarocho, se acompaña de tortillas de maíz hechas a mano, para poder disfrutarlo como se debe.

Las enfrijoladas nunca pueden fallar. Así de sencillo. El desayuno mexicano por excelencia tiene una combinación precisa de sabores que Restauro ha llevado a un extremo delicioso: la tortilla, el frijol, el pollo, el chorizo, la crema, el aguacate y el queso añejo nunca habían combinado tan bien. El esmero puesto en cada una de las partes hace de éste un plato particularmente especial. De nuestros favoritos.

Sin duda alguna, la joya de la corona de los desayunos de Restauro. Si hay un platillo que debes probar en tu visita matutina de fin de semana, es éste. Su salsa de chile pasilla es simplemente perfecta, y además de deliciosa, ideal para la cruda. Comentábamos líneas atrás que la cecina de Restauro es un auténtico placer, así que recomendamos que los pidas con ella (está también la opción de la arrachera, pero no dejes pasar la oportunidad de probar la cecina).

Por supuesto, tienen también la opción clásica de los chilaquiles verdes o rojos, pero esa pequeña variación que logran con la salsa se agradece en medio de la rutina.

Si no sabes qué probar, éste sin duda es el platillo.

El desayuno también va con postre ¿No? Perfectos en tamaño, cantidad, sabor y azúcar, estos churros son el cierre ideal para tu visita a Restauro.

¿Y con qué acompañar todo esto? La selección de jugos tiene para todos (naranja, toronja, zanahoria o verde), lo mismo ocurre con el café, que puede ir desde un americano clásico, un expresso o un capuchino (recomendamos ampliamente éste). Si lo que quieres es compartir, o unas ricas piezas de pan dulce o unos tamales (todos, como comentamos al principio, hechos por productores de la zona). Pero si realmente quieres llevar tu mañana a otro nivel, ve por las mimosas. Nada hace más divertido a un desayuno que unas mimosas. Créenos.

Puedes disfrutar de los desayunos de Restauro sábados y domingos de 9 de la mañana a 1 de la tarde. Ve, conócelos, disfrútalos y sobre todo #hazbarrio.