Dale la cara al Atoyac

Devolviéndole vida a nuestra ciudad

Dale la Cara al Atoyac

Hace siete años un grupo de amigos se aventuró a algo que pocos poblanos harían: navegar el río Atoyac. No es que fuera uno de los ríos más peligrosos del país, pero sí el tercero más contaminado. Alguna vez uno de los afluentes más representativos de nuestro Estado, el río fue víctima, no sólo de la contaminación de grandes industrias y de los habitantes, sino de algo más grave: la indiferencia de la gente. Durante décadas Puebla le dio la espalda al Atoyac y ahora, este grupo le daría la cara.

Dale la cara al Atoyac es una asociación civil comprometida y apasionada por la regeneración de la cuenca del Alto Atoyac, saben que éste es un problema que nos afecta y –por lo mismo– nos involucra a todos. Violeta Trinidad es una de las personas que decidió enfrentar el problema. La actual directora ejecutiva de la asociación nos explicó cuál es la problemática a la que nos enfrentamos, así como sus consecuencias.

Dale la cara al Atoyac

“Para nosotros es importante hacer muestreos y recopilar información de cómo y con qué se está contaminado el río, eso nos encamina hasta donde tenemos que llegar” – Violeta Trinidad

Pero esto es sólo el principio. Dale la Cara al Atoyac busca detonar acciones colectivas de impacto y vigilar la actuación de los responsables de la contaminación.

Es posible que no se dimensionen las proporciones del problema. “La cuenca del Atoyac recorre los Estados de Puebla y Tlaxcala a través de 70 municipios; su captación de agua proviene de los volcanes Popocatépetl, Iztaccíhuatl y Malinche”, nos indica Violeta respecto a un río que en su nacimiento es totalmente limpio, pero conforme avanza se va contaminando en mayor grado.

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En Puebla existen 22 plantas de tratamiento de agua municipales, de ellas, 5 operan sin cumplir con la Norma Oficial Mexicana del Agua (NOM). Las industrias, que deberían contar con plantas de tratamiento, no cumplen con este requisito y, aunque en Puebla el 50% cuente con una, éstas no funcionan. Eso, junto con los desagües clandestinos que arrojan desechos en el río, es un problema grave para el ecosistema.

De esta manera nos encontramos expuestos a sustancias tóxicas a través de distintas vías que tienen que ver directamente con lo anterior: el agua, el aire, el suelo y los alimentos son elementos contaminados con los que tenemos contacto directo, provocan enfermedades y deterioro a la salud, así como a la calidad de vida.

Dale la cara al Atoyac
“Tenemos estudios que determinan que las hortalizas y campos de cultivo situados al lado del río se riegan con agua contaminada, y eso nos lo comemos”

Violeta explica que, aunque es cierto que el sector industrial tiene gran responsabilidad, el 70% de la contaminación del río proviene del desagüe cargado con desechos que vienen directamente de nuestra casa.

Todo esto sucede porque no contamos con plantas de tratamiento adecuadas, pero también una gran responsabilidad se la lleva la sociedad. Muchos habitantes no se preocupan por reciclar e incluso ellos mismos tiran basura al río. Aceites, detergentes y otros productos no biodegradables, hacen que el río esté contaminado 8 veces más sobre el límite establecido por la NOM.

Existen muchas formas de darle la cara al Atoyac:

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Ser Atoyaquero de Corazón significa unirte al movimiento ciudadano decidido a provocar la regeneración de la Cuenca del Alto Atoyac. Es colaborar y aprender dentro de los cursos y talleres que realiza la asociación.

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A través de donativos puedes contribuir a la regeneración de la Cuenca del Alto Atoyac. De esta manera, ayudas a que se lleven a cabo más investigaciones y seguimiento al caso de contaminación del río.

La denuncia es muy importante, ya que permite visualizar los puntos que afectan al río y brinda los elementos para registrar afectaciones y hacer valer la ley. Si observas una anomalía toma una foto, entra a su página web denuncia, localiza tu ubicación y realiza tu denuncia.

Si eres estudiante, promotor, activista o ciudadano participando en la solución de problemáticas ambientales, puedes donar tu tiempo, talento y corazón a la regeneración del Atoyac. En Dale la Cara creen firmemente que la suma de talentos es esencial para crear soluciones reales e incluyentes.

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¿Eres una asociación civil, empresa, grupo ciudadano organizado o movimiento, trabajando a favor
del medio ambiente y la cuenca del Alto Atoyac? Entonces únete a esta plataforma que busca generar sinergia.

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