Gráfica del pasado para activar la reflexión del presente

La Demanda Inasumible

Gráfica del pasado para activar la reflexión del presente

El 2 de octubre no se olvida. Los sucesos ocurridos en la plaza de Tlatelolco, junto a los hechos que antecedieron y precedieron la matanza de los estudiantes, marcaron las acciones, pensamientos y luchas de varias generaciones. 1968 dejó una marca imposible de olvidar para los mexicanos. Ahora que se cumplen 50 años de esa fatídica fecha, extraña ver que la mayoría de los acercamientos conmemorativos vean al 68 como un evento con único valor en lo histórico. Estos acontecimientos piden ser narrados de otra manera para pensar su impacto en el presente.

¿Qué hace contemporáneo al movimiento del 68? Esta pregunta se plantea en la exposición La Demanda Inasumible: Imaginación Social y Autogestión Gráfica en México, 1968-2018 que se exhibe en el Museo Amparo gracias a la coordinación de los curadores Alberto López Cuenca, Duna Aquino, Tania Valdovinos Reyes y Renato Bermúdez Dini. Cabe destacar que ésta es la primera vez que colaboran varios curadores en una exposición presentada en el Museo Amparo, por lo que resalta la mirada sobre la colectividad del trabajo expuesto.

La Demanda Inasumible no es una muestra sobre el movimiento estudiantil del 68. Esta fecha se toma como punto de partida porque inauguró una forma distinta de concebir las luchas sociales y con ello a la gráfica de resistencia y de demanda popular. La exposición abarca hechos del México moderno que piden con urgencia una voz que denuncie las atrocidades del Estado y sea autocrítica con la sociedad. Ahí están presentes el sismo de 1958, el movimiento punk, las consignas de los electricistas a finales de los 70, el levantamiento zapatista, la matanza de Acteal, la marcha de las putas y otros movimientos que permitieron la visibilidad de lo que importaba para resarcir la fractura social.

A través de carteles, parches, música, fanzines, esténciles, volantes y calcomanías se crea un viaje donde lo importante es la resonancia de los mensajes y no los autores, de ahí la decisión curatorial de presentar las piezas sin el nombre de los creadores pero destacando los colectivos que prestaron el material y orientaron con información, como: Taller Grieta Negra, Lxs Crecientes, el archivo Arnulfo Aquino, el Taller A. C. y muchos más.

Más que una muestra para admirar la gráfica del pasado, La Demanda Inasumible es una invitación a mirar otras prácticas culturales para analizar lo que hacemos para que nuestras voces sean visibles ante la injusticia, la desigualdad y la impunidad. La muestra permanece hasta el 14 de enero en las Salas de Exposiciones Temporales Planta Alta del Museo Amparo. Puedes entrar a la página del museo para consultar las fechas de las actividades que acompañan la muestra, como el ciclo de cine Imaginarios en Resistencia.

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