El otoño llegó y con él, uno de los mejores platillos para decirle adiós a la dieta: el Pan de Muerto, una exquisita creación mexicana que nos hace sentir conectados con nuestros antepasados y nos regala reconfortantes momentos en cada mordida.

Partiendo de ingredientes clásicos como el aromático azahar, la mantequilla y el azúcar, el pan de muerto ha evolucionado, se ha reinventado y ha agregado nuevos sabores a la tradición. De la mano de la creatividad de los panaderos, este emblemático pan sigue, después de décadas, destacando tanto por su popularidad como por su sabor, y antojando a generaciones de Comelones de todas las edades. 

En está ocasión, me di a la ardua tarea de disfrutar diferentes opciones de pan de muerto, que en verdad me hicieron revivir el antojo de la temporada. Aquí les presento mis 10 propuestas favoritas; llenas de mucho color, sabor, texturas y técnicas que los harán agasajarse al máximo.

Como buenos hijos de la masa madre, Ricardo y su equipo decidieron crear un pan único, tradicional y similar a un nube, ¿el resultado? Una verdadera delicia. Aquí la sencillez es sinónimo de perfección; desde las ligeras notas cítricas de la naranja/azahar hasta la textura esponjosa/azucarada, hacen de este pan un agasajo, ya sea solo o acompañado con alguna bebida caliente. Esta versión hecha de masa madre les fascinará (se los prometo), además, la experiencia es aún mejor gracias a su increíble packaging, les aseguro lo amarán. 

Óscar y Bárbara, expertos en la atención a los detalles, crearon una preciosa caja que alberga 12 mini panes de muerto rellenos: verdaderas obras de arte. Deliciosos pancitos tradicionales que esconden exquisitos rellenos que van desde crema de cajeta, praliné de avellanas, vainilla de Papantla con guayaba y chocolate semi amargo; un deleite tanto para la vista como para el gusto. Mi mejor complemento para esta docena es un cremoso Latte, un mix que es garantía de pura felicidad. 

La talentosa Chef Ruth Salas hace magia en su taller, y es que al probar dos de sus tres versiones de pan de muerto, quedé impactado con la belleza del pan y lo exquisito de sus sabores y texturas; panes verdaderamente esponjosos, que casi flotan en las manos, en cuya masa destacan sus notas cítricas del azahar, que se tornan explosivas con el relleno de nata y guayaba. Si la versión tradicional es todo un festín, imaginen la rellena de cremoso de maíz rojo. 

Fernanda, la mente detrás de esta repostería artesanal, se lució con su receta del tradicional pan de muerto. Presentada en versiones pequeñas, delicadas y esponjosas, el pan de muerto de Cocoberry Bakery tiene un agradable sabor a mantequilla, un ligero toque de azahar y en el centro, un pequeño conejo turín de chocolate. Tradicional o relleno, solo o con una taza de café al lado, sea como sea, estoy seguro que este pan de muerto será su nueva obsesión.  

Marisol nunca se cansa de innovar y en esta ocasión lanzó 4 espectaculares versiones de pan de muerto relleno: Pumpkin pie, Lemon pie, Café de olla y el ya tradicional Dulce de leche. Un verdadero placer. Sus rellenos para nada empalagosos, albergados en panes esponjosos harán casi inevitable que deseen probar todos de un jalón.

David y Jezer pintaron la tradición de colores con sus dos increíbles pospuestas de pan de muerto: la versión tradicional, un esponjoso pan de muerto arcoíris; y la versión rellena, la Catrina, un espectáculo de sabores relleno de cremoso de calabaza, mascarpone, sal de Colima y pepitas horneadas. La masa de ambas propuestas es una receta casera inigualable. Las texturas, los colores y el sabor hacen de este pan todo una delicia. 

Esta versión franco mexicana del tradicional pan de muerto es una delicia. El pan es esponjoso con un sutil sabor a jugo de naranja fresco; la capa de azúcar es ligera y complementa a la perfección el cremoso relleno de nata de rancho y crema montada. Este es un pan ideal para los Comelones que buscan versiones no tan pesadas pero con mucho sabor y textura. Su mejor acompañante siempre será un chocolate caliente o un capuchino. 

Rafa es un apasionado de la panadería que no se cansa de experimentar, y su versión de pan de muerto es ejemplo de ello. Sencillo pero puntual, su pancito es esponjoso y azucarado, con fuertes notas de azahar. A este manjar agrégale una espumosa taza de chocolate caliente y tendrás el combo perfecto para apapacharte.

Sin duda este es uno de los clásicos de clásicos en la CDMX, y es que el pan de muerto de Costra es una delicia. Mantequilla neozelandesa, ralladura de naranja e ingredientes secretos, hacen un pan perfecto. Lo mejor de todo es que ya cuentan con una versión vegana, así que no hay pretexto para que todos los Comelones disfruten este icónico pan con una taza de chocolate caliente, vaya manera de gozar la vida. 

Pan de Nube creó 2 opciones de pan de muerto, ambos llenos de sabor y texturas: su versión tradicional, con clásicas notas cítricas, caracterìsticas del azahar; y su versión con jengibre, de sabor ligero y para nada picante. Les recomiendo chopear cualquiera de estos esponjosos panes en chocolate caliente, la combinación de sabores resulta simplemente adictiva.

Comelones, para que no se queden con el antojo, les recomiendo que corran a darse un clavado en las cuentas de Instagram de cada proyecto enlistado, así podrán conocer las dinámicas de servicio, duración de la temporada, y precios. Cualquier duda o recomendación, ya saben dónde encontrarme, nos leemos pronto.