La imagen mantiene su relevancia y valor como una de las maneras más eficaces para conservar la historia, relacionarnos entre sí y comprender el universo. Pero la saturación de las imágenes que percibimos a diario va en aumento la proliferación de la tecnología, la expansión de las redes sociales y la tendencia de comercializar la información en su forma más simple. Pensar sobre el poder de la imagen  y el uso que le damos en el contexto actual es de vital importancia para saber hacia dónde nos dirigimos como sociedad y eso es lo que hacen cada una de las exposiciones de este listado.

El Radar de Arte de Abril contiene muestras que parten de la imagen bidimensional y la gráfica para reflexionar sobre la fiabilidad de la percepción, los caminos personales de lo espiritual, la vigencia del humor crítico y la construcción de los fetiches. Las exposiciones de Iraís Fernández y Víctor Mora incluso indagan en caminos para expandir la imagen hacia otros medios y expandirla en una reflexión sobre sus propiedades. Si una imagen vale más que mil palabras, vale la pena analizar cada trazo que la compone.

La posibilidad de expandir la imagen más allá de lo figurativo, lo bidimensional y lo visual es el tema de esta exposición. Iraís Fernández interviene negativos de 35 mm con varios químicos con los que obtiene patrones y colores irregulares. Estos patrones son llevados a otros medios como el collage, dioramas y distintas técnicas con textiles que nos hacen preguntarnos sobre la forma en que nos relacionamos con las imágenes y las nuevas cualidades que adquieren las cosas al mutar. Entre las piezas destaca una con la que la percepción entra en juego: un híbrido entre una cianotipia y un textil que funciona similar a un theremín al poner tu sombra sobre ella. Iraís hace la imagen cante, adquiera volumen y se vista con múltiples texturas.

Hasta el 20 de abril

La Emisora Gourmet

5 Oriente #5 San Andrés Cholula, Pue.

Manglar surgió con una historia que Verónica Bapé vivió en una residencia de producción artística en el Art House de Tulum, Quintana Roo. Bapé experimentó la incertidumbre de perderse en la selva con insectos enormes caminando a su lado y la vegetación cubriendo todo el panorama convirtiéndolo en un laberinto. Esto la llevó a recrear su visión en una especie de islote dentro de la galería de Impronta Lab. Al inicio, las obras se ven a través de una cortina que funciona como un filtro. Desde ahí, las formas son inciertas y  los colores se difuminan. Una vez que se pasa el filtro, se descubren acuarelas y marcas en las paredes que recuerdan la inestabilidad de los contornos de la jungla y la manera en que cambia nuestra percepción según el contexto en el que nos encontremos.

Hasta el 27 de abril

Impronta Lab

10 Oriente #801 San Pedro Cholula, Pue.

Peluches de series animadas, figuras de plástico, libros vaqueros y dulces son colocados en recipientes para ser admirados en un sentido figurado y literal al mismo tiempo, porque, en esta exhibición, Jesús Lima pinta estos objetos en un lienzo enmarcado mientras que coloca a otros en frascos como si se trataran de frutas en conserva. Lima muestra el poder de la imagen para crear fetiches y es por eso que la infancia, que está presente en el resto de nuestras vidas en forma de nostalgia, permea en casi todos los cuadros. No es casualidad que unas pistolas de juguete y un billete de 200 pesos figuren en estos bodegones modernos como un comentario sobre la idolatría de la sociedad actual hacia la violencia y la cultura del consumo.

Hasta el 2 de mayo

Museo Universitario Casa de los Muñecos

2 norte #2 Centro, Puebla, Pue.

En un primer acercamiento los cuadros de la exhibición El Hombre Muerto en el Universo B parecen sacados de una premonición apocalíptica que mezcla simbología sacra con elementos paganos pero el interés de Samo va por otro camino. El estilo hiperrealista de este artista funciona para ilustrar una perspectiva metafísica sobre la muerte como un nuevo comienzo que perpetua el ciclo de la vida y hace transcender el mundo material. De ahí la fuerte presencia de esqueletos que nos recuerdan la importancia de mantener una postura ante la mortandad, ya que así surge cierta noción de lo que entendemos como espiritualidad. Vida y muerte son pare de un mismo viaje que queda metaforizado en el barco de madera con alas gigantescas que cierra la muestra.

Hasta el 6 de mayo

Museo de la Memoria Histórica Universitaria

3 oriente #1008 Barrio de Analco, Puebla, Pue.

Estamos tan acostumbrados a las técnicas tradicionales, como el grabado y la pintura, que se nos olvida que existe un amplio espectro de métodos para crear gráfica. Víctor Mora explora el legado de Ray Johnson, Andy Warhol y Robert Rauschenberg para usar la copia fotostática en su obra artística mientras la mezcla con otros elementos gráficos que muchas veces descartamos como bellos, entre ellos las etiquetas de cervezas o los carteles de sonideros. Las piezas de Copi-Arte recuerdan a la gráfica contestataria de los movimientos estudiantiles y a los álbumes familiares viejos. La obra de Mora relaciona los ejercicios de la memoria con la capacidad de la gráfica para obtener imágenes exactas repetibles.

Hasta el 20 de mayo

Museo Tecnológico de Monterrey

4 norte #5 Centro, Pue.

Diseñador gráfico de formación y asiduo de la ilustración por elección, Elmer Sosa es una de las figuras más importantes en el ámbito del cómic y el cartel en México. Su trabajo ha recibido numerosos reconocimientos a nivel internacional y se ha exhibido en Francia, Japón, Ucrania, Finlandia, Italia, Brasil, Bolivia, Francia, Alemania y Rusia, por mencionar algunos países. En Bendito Destierro se exhiben varios carteles que contienen a personajes con gestos extravagantes, dibujados con un estilo que aprovecha la expresividad de los colores y el detalle trazado de manera cuidadosa. El ingenio brilla en esta muestra donde se puede encontrar desde un gato dibujo con la palabra “love” hasta los 7 pecados capitales encarnados en caricaturas.

Hasta Julio

MUSA Cultura Visual

3 Sur #504 Centro, Puebla, Pue.