La Aldaba es un absoluto clásico en Puebla. Tal vez no esté ubicado en una de las zonas con mayor presencia restaurantera, pero justo eso es parte del encanto: está en un área residencial, de barrio. Por lo mismo todo mundo los conoce e ir a comer ahí es como ir a comer a casa de amigos.

Este pequeño local se especializa, no sólo en comida española, sino más específicamente aún, vasca, cosa que lo hace aún más único dentro de este tipo de restaurantes

Restaurantes de comida española tenemos muchos en Puebla, pero los que se especializan en las delicias del País Vasco son pocos y en La Aldaba tienen los platillos más representativos de la región, así como de España.

Todo era cocinado por los dueños del lugar, Carlos de Abiega e Inmaculada Eguren, tras el fallecimiento de Carlos hace 8 años al frente quedaron Inma y su hija Estíbaliz, quien ha buscado darle un giro más nuevo a este espacio.

El hecho de que la familia misma sea la que esté a cargo de la cocina, no sólo le da un gran sabor a todo, sino que uno auténtico, de hogar.

Simple: las croquetas de aquí son las mejores que tenemos en Puebla. A pesar de ser una entrada, podría comer platillos enteros de ellas. De jamón serrano y cabrales, son hechas como se debe: con bechamel y no con papá.

Los chipirones y las alubias con almejas son platos que de tan buenos, la gente viene desde lejos a probarlos o los pide por anticipado. El sabor casero de estos dos es la mayor cualidad de estos platos, pues el cariño con el que se hacen se puede probar.

Pero la verdadera estrella es sin duda la Tarta de Santiago, no encontrarás otra igual en Puebla. Tan es así, que hay comensales que compran tartas enteras y se las llevan a casa, o incluso restaurantes en Puebla y en la Ciudad de México se las piden.

Acompaña todo con una buena sangría, un agua fresca o mejor aún, una copa de vino.

Arturo Loría

Editor de Guía oca

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